Familiares de los diez mineros atrapados en la carbonera El Pinabete, firmaron el acuerdo con la Coordinación Nacional de Protección Civil para la construcción de un tajo a cielo abierto para el rescate de los trabajadores. El convenio incluye que están dispuestos a recibir una indemnización, aunque la cantidad se mantiene en suspenso, y el compromiso del gobierno federal para la instalación de un memorial en las instalaciones de la mina.
La coordinadora nacional de Protección Civil, Laura Velázquez, señaló que será la Comisión Federal de Electricidad quien se encargue de las obras, que arrancarán esta semana. Cada quince días los familiares recibirán informes sobre los avances de los trabajos.
De manera paralela a la construcción de este tajo, seguirá el bombeo de agua de la mina inundada, y desde el martes pasado comenzaron con los trabajos de mapeo y hoy las tareas topográficas, mientras que la maquinaria arribará en las próximas horas.
“Ayer empezaron ya a presentarnos algunos planos de diseño de ingeniería y construcción, va a estar a cargo la CFE de todo esto, estamos a todo lo que da trabajando, se cree seguramente más adelante habrá algunos especialistas que iremos informando, mi idea es estar aquí por lo todo este tiempo hasta que no quede arrancado bien y cada 15 días para informando a la familia del avance”, comentó la funcionaria federal.
El plan de rescate se llevará de seis a once meses para llegar a los restos de los mineros que quedaron atrapados desde el pasado 3 de agosto. El próximo sábado se llevará a cabo una misa en memoria de los trabajadores, en el punto donde se habilitó un campamento para que los familiares esperaran noticias de las autoridades.
“Ya preparándonos para el sábado tengan este momento que ellos nos solicitaron un momento cercano ahí a los pozos, un momento íntimo, personal, que van a tener en la mañana con una misa están haciendo todos los preparativos y apoyándolos nosotros en todo”, agregó Laura Velázquez.
LaJornada
