- Tiempo para la democracia o para la contaminación visual
- Burocracia en Chihuas, un Malestar Creciente
- El contraste preocupante de la “poli” de Bonilla
- Canacintra de manteles largos
Este domingo 2 de octubre inicia el proceso electoral local en Chihuahua, un proceso que pondrá en juego más de 600 cargos públicos en el estado, entre los que se encuentran la gubernatura, las 27 diputaciones locales, las 67 alcaldías y sindicaturas.
Con este inicio, los siete consejeros electorales encabezados por Yanko Durán Prieto por fin comenzarán a desquitar el sueldo que perciben, pues ahora sí empezarán a trabajar los siete días de la semana de aquí al mes de julio-agosto del próximo año.
A dicha sesión se espera acudan funcionarios de primer nivel tanto del Poder Ejecutivo como del Judicial, organismos autónomos y funcionarios electorales.
Inicia entonces ahora sí los tiempos establecidos por la ley electoral, no así todo lo que ocurrió desde hace casi un año con la sucesión adelantada a nivel federal.
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Entre la burocracia municipal de Chihuahua, ha surgido un malestar que, aunque inicialmente afectó a unos pocos, ha alcanzado una gravedad tal que amerita hacerlo público a través de esta columna. Nuestro objetivo es evitar que sean muchos más los afectados.
Varios derechohabientes del Instituto Municipal de Pensiones, donde Juan Antonio González Villaseñor ejerce su segundo mandato, han comenzado a denunciar la falta de previsión, seriedad y profesionalismo de este instituto. Como responsable, González Villaseñor no ha cuidado adecuadamente los procedimientos para las intervenciones quirúrgicas en los hospitales convenidos.
Para ser más claros, los pacientes informan que justo cuando están anestesiados y listos para la cirugía, los médicos les comunican que las prótesis no han llegado o que no cuentan con las herramientas y materiales necesarios para realizar la operación. Esta situación es tan seria y delicada que pone en riesgo la salud e incluso la vida de los pacientes.
Recordemos que el 10 de marzo del año 2020, la entonces presidenta municipal, María Eugenia Campos, despidió a González Villaseñor por presuntas anomalías en las licitaciones y en la adquisición de equipo y medicamentos. El golpe a las finanzas del Municipio fue tan duro que Campos solicitó al Órgano de Control Interno Municipal una revisión minuciosa de cada peso y centavo, y que actuara en consecuencia.
La pregunta que surge ahora es: ¿Está el alcalde Marco Bonilla al tanto de estas fallas? Si se produjera un problema mayor, su futuro político podría estar en juego. ¿O acaso le gusta llevarle la contraria a quien manda en el Palacio de Gobierno y lo llevó triunfante a la presidencia municipal?
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La buena imagen que algunos policías municipales han logrado construir gracias a su dedicación y compromiso con sus deberes como servidores públicos, se ve empañada por la mala reputación de varios de sus compañeros.
Es importante aclarar que no podemos generalizar a toda la corporación. Sabemos que existen elementos que portan con orgullo el uniforme, que ingresaron a las filas con el deseo genuino de servir y preservar la seguridad de los chihuahuenses. Sin embargo, también existen otros cuyo comportamiento solo busca desprestigiar la labor de los agentes y, por ende, la de sus superiores.
De nada sirve que un día tanto el alcalde Bonilla como el jefe Salas, director de Seguridad Pública Municipal, salgan muy contentos a declarar que gracias a sus elementos se ha logrado la captura de asesinos, ladrones, violadores, etc., mientras que, por otro lado, algunos agentes presumen la impunidad con la que trabajan en la corporación.
No es uno ni dos ejemplos los que podemos citar en este espacio. Podemos destacar el audio que circuló por las redes sociales donde un policía municipal –cuyo destino aún desconocemos– intentaba hacer acuerdos con un supuesto delincuente. O qué decir del video donde unos agentes vestidos de civil se graban consumiendo bebidas embriagantes a bordo de una unidad policial y con las armas reglamentarias a un lado. Recordemos también el video de los “Besucones”, cuya acción resultó en que los policías protagonistas fueran suspendidos sin goce de sueldo por unos días.
Todo esto nos indica que el jefe Salas debería prestar mayor atención a esos grupos minoritarios de agentes que parecen tener como consigna desprestigiar a la corporación. Es necesario ser más drásticos con los exámenes de confianza y asegurarse de que dichos elementos no encuentren formas de evadirlos.
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La presidenta de Canacintra, Isela Molina estuvo de manteles largos al celebrar con socios y expresidentes, el 77 aniversario de la cámara,
Fue en el edificio de Canacintra donde se aglomeraron gente de la cámara e invitados como el Recaudador de Rentas Rogelio Loya, el director de Limpia Gibran Solís, entre otros.
Canacintra ha tenido a lo largo de estos 77 años 35 presidentes y ahora Isela Molina es la primera mujer que preside esta cámara.
La actual presidenta de Canacintra estuvo muy emocionada durante este evento, en donde también develaron una placa conmemorativa al 77 aniversario.
Al final, los presentes degustaron de un vino muy fino, shots de tequila y un ambigú.
