Al manifestar que “a la Corte ya la perdimos”, el presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que emitió un decreto la semana pasada en el que clasifica al Tren Maya, Tren Interoceánico, y los aeropuertos de Palenque, Chetumal y de Tulum, como de interés público y de seguridad nacional, porque afirmó que ya sabía que la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) tenían la intención de frenar estas obras.
Esto, luego que ayer la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) declaró invalido en su totalidad el “decretazo” presidencial para reservar información sobre las obras prioritarias del gobierno federal.
El jefe del Ejecutivo federal aseguró que con estos actos a la Corte “ya la perdimos” y acusó que ahora “de manera descarada”, se muestra que los ministros de la Corte están al servicio del poder, de los potentados, de la oligarquía y alejados del pueblo.
“Nos adelantamos porque ya sabíamos que en la Corte había la intención de frenar la obras que estamos realizando en el sureste, el Tren Maya y otras obras importantes de benéfico para la gente, y la Corte como se dice coloquialmente, `ya la perdimos´.
“Entonces ya sabíamos que iban a tratar de frenarnos en la construcción de estas obras estratégicas y no estoy hablando al tanteo, no estoy inventando nada», dijo.
Acusó que el Poder Judicial y en especial los ministros de la Suprema Corte están al servicio de la minoría y no tienen ningún aprecio a las acciones en beneficio del “pueblo raso”.
“Yo creo que siempre había estado alejada del pueblo, y cercana al poder, pero ahora de manera descarada, están al servicio de los potentados de la minoría, de lo que conceptualmente, teóricamente se conoce como la oligarquía es que el poder de los ricos. Eso es la oligarquía, la democracia es el poder del pueblo.
“Es como vivir en otro mundo. Existe un divorcio completo, entre este aparato que simula impartir justicia y la necesidad de la mayoría de los mexicanos”, dijo.
ElUniversal
