- Le hace agua la canoa al gabinete estatal
- Cabada le hace al “monje loco” en feis
- Corral se sale con la suya, ni cosquillas siente
- Varios ausentes en el desfile “Arriba Juárez”
Aún a sabiendas de que la gobernadora Maru Campos no podía asistir a la reunión con autoridades de la sierra de Sonora y Chihuahua encabezada por el presidente de la república, Andrés Manuel López Obrador, y celebrada ayer allá en el municipio de Rosario, no hubo por parte de la federación la más mínima caballerosidad y urbanidad política con el gobierno de Chihuahua.
En un notorio dejo de descortesía plena de la presidencia de la república no se pudieron esperar a que la gobernadora de Chihuahua se recuperara de su convalecencia, y este domingo sin decir agua va, realizaron dicha reunión en donde participaron autoridades municipales que tienen la característica de ser colindantes entre ambos estados.
La reunión se celebró con la presencia del gobernador de Sonora Alfonso Durazo de origen moreno y la ausencia no solamente de la gobernadora Maru Campos, sino de representante alguno del gobierno de Chihuahua.
No fue invitado ni el secretario general de gobierno César Jáuregui Moreno, ni el sonorense Luis Serrato, coordinador del gabinete marucampista.
Realizaron la reunión con tal urgencia que parecía un asunto de vida o muerte cuando lo único que representa fue un apoyo de 50 millones de pesos a los seis municipios de ambos estados.
Esto da por sentado el fuchi del presidente de la república a la gobernadora Maru Campos y al propio gobierno del estado; lo anterior para beneplácito y regodeo del delegado de los programas del Bienestar Juan Carlos Loera de la Rosa.
Esto le sigue abonando a la fría relación de ambas instancias de gobierno y sienta un precedente de guerra electoral para el 2024.
Pero a fuerza de la verdad en este caso quien aplicó toda la descortesía del mundo fue el gobierno federal.
Quien se presentó a dicho evento imitando a un pavorreal fue el superdelegado Juan Carlos Loera, seguramente presumió que a partir de ayer ya logró tener sobrina presidenta del Comité Directivo Estatal de Morena, Brigitte Granados.
No sabemos ya en corto cuanta cuerda le dio el huésped de palacio nacional a los loeristas; lo que si estamos seguros es que por esta ocasión quedaron fuera del apapacho político de AMLO los crucistas.
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Ni a lancha llega el gabinete estatal encabezado por Maru Campos que ha tenido una serie de renuncias desde que trascurrió el primer mes de gobierno hasta la fecha.
El gobierno marucampista ha tenido renuncias de titulares y coordinadores en Comunicación Social, en la Secretaría Particular, en la Dirección de Transporte, en Educación, en Desarrollo Rural, En la Junta Central de Aguas, En el Cereso No. 3, en Licencias, entre otras secretarías y dependencias.
Los motivos de las renuncias forzadas han sido variados desde la suposición de actos de corrupción pasando por la ineficiencia la inexperiencia y hasta asuntos de carácter político partidista.
Lo que queda claro es que la estabilidad en el gabinete marucampista no ha sido la principal característica en este sexenio.
Y pareciera que una semana hace agua y otra también, total que antes que llegue el primer informe de gobierno las renuncias forzadas y no forzadas se han dado al por mayor.
Todo mundo esperaba que los cambios se dieran como es costumbre pasado el primer informe de gobierno, pero en esta administración estatal la regla se rompió y empezaron desde el primer mes y no han parado.
Sin embargo, se dice que en septiembre vendrá otra gran oleada de cambios donde se pueden incluir algunos enroques; recordemos que una gran parte del panismo chihuahuense se encuentra en la banca, algunos porque les han olfateado el aroma del corralato.
Otros más esperan impacientemente desde la banca para ser llamados como bateadores emergentes.
Así están las cosas al interior del gabinete estatal, por ello se explica la presencia de personajes de la época de Patricio Martínez, de Felipe Calderón y hasta de César Duarte quienes en las últimas fechas han acudido con el secretario general del gobierno César Jáuregui y con el coordinador de gabinete, el sonorense Luis Fernando Serrato, para tratar de taponear la canoa para que no siga haciendo agua.
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Quien se sigue significando por su inoperancia parlamentaria, gestora y política es Armando Cabada.
En Juárez los electores desconocen el trabajo parlamentario que obligado está a realizar el diputado plurinominal, no se sabe cuántas iniciativas ha presentado, cuántas veces ha subido a tribuna, cuántas gestiones y en que niveles ha realizado para ciudad Juárez y para el estado de Chihuahua.
Cabada escuetamente sólo sube a sus redes sociales el trabajo que hace su chalán el doctor Carlos Ponce Torres de entrega de despensas, ya que ni siquiera esta nimia actividad la realiza personalmente el legislador moreno.
Por lo que muchos en Morena están firmemente convencidos que la adquisición política del expresidente municipal Armando Cabada fue una inversión “balín” donde salió más caro el caldo que las albóndigas.
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El abogado y articulista Gerardo Cortinas Murra puso el dedo en la llaga al denunciar al exgobernador Javier Corral, interpuso un recurso primero ante el Congreso del estado y luego ante la Secretaría de la Función Pública.
Pero si el desafuero está prácticamente desechado en la torre legislativa, a muchos se les hace muy gorda Antonia para que la inhabilitación por diez años vaya a prosperar en la fantasmal Secretaría de la Función Pública estatal.
Pareciera ser que hay un manto protector a nivel nacional que alcanza a incidir fuertemente en las decisiones del palacio de gobierno estatal a favor del exgobernador tenista y golfista de apellido Corral.
Menos mal que el actual sexenio no ha bautizado con ningún nombre la revisión de las cuentas públicas y de la función pública del corralato, como si lo hizo este quinquenio con su famosa Operación Justicia para Chihuahua, donde persiguieron a más no poder a César Duarte y a todos quienes olieran a cercanía con él.
Pero al actual gobierno del estado todavía le faltan cinco años de ejercicio gubernamental y los chihuahuenses esperan que los graves errores como los cometidos, por poner un ejemplo en el BRT 2 y en las inversiones del Fidecomiso de Puentes Internacionales no vayan a quedar impunes al más puro estilo de la política mexicana.
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El desfile “Arriba Juárez” para festejar el aniversario luctuoso del cantautor juarense, Juan Gabriel, se llevó a cabo de una manera colorida, con 21 contingentes que participaron en carros alegóricos que, a pesar de la poca gente, el animo de los presentes no se hicieron esperar.
Si pudiéramos ponerle un pero a este evento que fue el inicio de una serie de actividades que se llevará durante los siguientes días hasta el 27 de agosto, es la falta de algunos funcionarios de primer nivel y algunos que otros regidores.
Podemos mencionar al director de servicios Públicos, Ernesto Guevara Vázquez; la coordinadora de Asesores, Daniela González Lara; Adriana Fuentes y otros más que brillaron por su ausencia.
Eso no fue motivo para iniciar los festejos por el aniversario luctuoso del Divo de Juárez donde los presentes corearon sus canciones.
Seguramente por la ausencia del Alcalde Cruz Pérez Cuéllar, los faltistas aprovecharon para no asistir, cuando algunos de ellos, están promoviendo las actividades para conmemorar el aniversario luctuoso de Juan Gabriel.
Una vez que esté de regreso el presidente municipal, seguramente veremos a los funcionarios ausentes pegaditos el líder de la comuna juarense durante los eventos que vaya a tener en esta semana, que sin duda uno que otro funcionario estará buscando los reflectores de los medios de comunicación para tener la foto del ruedo.
