Las autoridades nigerianas descubrieron una línea de conexión ilegal al mar desde una de sus principales terminales de exportación de petróleo que llevaba nueve años funcionando sin ser detectada, dijo el director de la petrolera estatal NNPC, Mele Kyari.
La conexión de 4 kilómetros desde la terminal de Forcados, que suele exportar unos 250 mil barriles diarios (bpd) de petróleo, al mar fue descubierta durante una campaña de lucha contra el robo realizada en las últimas seis semanas, señaló Kyari ante una comisión parlamentaria.
“El robo de petróleo en el país lleva produciéndose más de 22 años, pero la dimensión y el ritmo que ha adquirido en los últimos tiempos no tiene precedentes”, declaró Kyari en una grabación de audio de la sesión informativa revisada por Reuters.
Los ladrones suelen intervenir oleoductos en tierra para desviar el petróleo sin ser detectados mientras siguen operando, pero una línea ilegal en el océano es muy poco habitual y sugiere una operación de robo más sofisticada.
El operador de Forcados, SPDC, una filial local de Shell, no hizo comentarios inmediatamente.
Pérdidas para el mayor exportador de petróleo de África
Nigeria, que suele ser el mayor exportador de petróleo de África, está perdiendo los ingresos potenciales de unos 600 mil bpd de petróleo, dijo Kyari, ya que una parte es robada y las compañías petroleras dejan de explotar ciertos campos en lugar de alimentar los oleoductos intervenidos por los ladrones.
En agosto, las exportaciones de crudo cayeron por debajo de 1 millón de bpd por primera vez desde al menos 1990, lo que ha privado a Nigeria de una cantidad de dinero crucial.
Las cargas en la terminal se han detenido desde que se detectó una fuga en una manguera submarina de la terminal el 17 de julio. Shell declaró esta semana que esperaba que los cargamentos se reanudaran en la segunda quincena de octubre.
En agosto, la NNPC adjudicó contratos a empresas, incluidas las de antiguos militantes, para acabar con el robo de petróleo.
LaJornada