Altos cargos de las Fuerzas Armadas de Rusia debatieron la posibilidad de usar armas nucleares tácticas en el marco de la guerra de Ucrania, según la Inteligencia estadounidense, que sitúa al presidente ruso, Vladimir Putin, fuera de estas supuestas conversaciones.
Las fuentes consultadas por el periódico ‘The New York Times’ reconocen que la mera existencia de esa conversación generó alerta en Washington, que la atribuía a la creciente frustración de la cúpula militar rusa tras la pérdida de territorios en el sur y el este de Ucrania.
No obstante, a las autoridades norteamericanas no les consta que las rusas hayan emprendido movimiento alguno que anticipe la posible utilización de armamento atómico. El Departamento de Defensa estadounidense estima que Moscú dispone de hasta 2.000 armas tácticas, susceptibles de ser utilizadas en el campo de batalla.
Tanto el Gobierno de Estados Unidos como otros aliados occidentales han advertido de que el uso de armamento atómico sería una escalada inaceptable en el conflicto que estalló en febrero. El presidente ruso, Vladimir Putin, descarta que tenga previsto recurrir a este tipo de equipos, aunque ha agitado la amenaza en varias ocasiones.
De hecho, Putin supervisó en octubre unas maniobras de las fuerzas nucleares rusas en las que se ensayó un ataque «masivo», como lo describió entonces el ministro de Defensa, Sergei Shoigu. También ha denunciado supuestos planes de Ucrania para utilizar una bomba sucia, que incluye material radioactivo.
El portavoz del Kremlin, Dimitri Peskov, ha desmentido la información publicada por ‘The New York Times’, acusando a Estados Unidos «inflar» el debate sobre el armamento nuclear, según la agencia de noticias Bloomberg.
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