Israel criticó el jueves la decisión de Brasil de conceder amarre a dos buques de guerra iraníes en medio de presiones por parte de Estados Unidos, e instó al Gobierno del presidente Luiz Inácio Lula da Silva a expulsarlos.
Los buques atracaron en Río de Janeiro el domingo. Reuters informó que Brasil se había negado a admitirlos en enero, en un gesto de buena voluntad de Lula mientras volaba a Washington para reunirse con el presidente estadounidense, Joe Biden.
Israel e Irán llevan décadas enzarzados en un conflicto al estilo de la Guerra Fría, que ha incluido acusaciones mutuas de sabotaje marítimo, mientras Teherán se enfrenta a una presión mundial cada vez mayor por su programa nuclear y su conducta regional.
Lior Haiat, portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de Israel, calificó el atraque de los buques de guerra en Brasil de «acontecimiento peligroso y lamentable», y acusó a la armada iraní de cooperar con entidades sancionadas de Teherán.
«Todavía no es demasiado tarde para ordenar a los barcos que abandonen el puerto», dijo Haiat en Twitter.
La oficina de prensa del presidente Lula no respondió a una petición de Reuters para hacer comentarios.
Los barcos también han provocado tensiones con Estados Unidos. En una rueda de prensa celebrada el 15 de febrero, el embajador estadounidense en Brasil había instado a este país a no permitir el atraque de los buques.
El miércoles, el senador Ted Cruz pidió sanciones contra el país sudamericano tras el atraque, calificándolo de «amenaza directa a la seguridad de los estadounidenses».
«La administración Biden está obligada a imponer las sanciones pertinentes, reevaluar la cooperación de Brasil con los esfuerzos antiterroristas de Estados Unidos y volver a examinar si Brasil mantiene medidas antiterroristas efectivas en sus puertos», dijo el republicano Cruz en un comunicado.
Un anuncio publicado el 23 de febrero en una gaceta brasileña indicaba que los buques de guerra habían recibido permiso para atracar entre el 26 de febrero y el 4 de marzo.
La diplomacia con Irán fue uno de los aspectos más destacados de los intentos de Lula por reforzar la posición internacional de Brasil durante sus anteriores mandatos presidenciales.
En 2010 viajó a Teherán para reunirse con el entonces presidente Mahmud Ahmadineyad, en su intento de negociar un acuerdo nuclear entre Irán y Estados Unidos.
Reuters