Se acerca la temporada de calor y la mayoría de las familias comienzan a planear actividades al aire libre, en donde la exposición a los rayos del sol es más intensa, por lo que el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Chihuahua exhorta a tener precaución y no exponerse al sol por largo tiempo, debido a que se pueden generar quemaduras en la piel expuesta.
La doctora Brenda Ramírez Vega, coordinadora auxiliar de Salud Pública del Instituto, explicó que las quemaduras pueden presentarse desde ardor con coloración roja, hasta ampollas o manchas en algunas ocasiones dolorosas al tacto, que con el paso del tiempo y exposición al sol constante, pueden generar cáncer.
Señaló que de las 11 de la mañana a las cuatro de la tarde, los rayos ultravioleta se sienten con mayor intensidad, por lo que no se recomienda acudir a lugares abiertos al medio ambiente o exponerse directamente a la luz solar con “baños de sol” durante estos horarios.
Indicó que las quemaduras por exposición solar se clasifican en primer grado, cuando la zona se pone roja y da la sensación de ardor; las de segundo grado, el daño atraviesa varias capas de la piel y además de dolor intenso se presentan ampollas.
Manifestó que cuando se presenta una quemadura de segundo grado no es recomendable colocar remedios caseros para sanar y aliviar el dolor. Es preferible poner agua con mucho cuidado y cubrir con gasas estériles la zona, sin frotar, ya que la piel puede desprenderse; y acudir cuanto antes a solicitar atención médica.
La exposición directa y prolongada al sol en personas sin bloqueador causa envejecimiento prematuro de la piel, ya que ese tipo de luz adelgaza la capa llamada dermis. También se pierde el color natural y se suelen presentar arrugas prematuras en brazos y piernas, así como líneas de expresión en la cara.
Ante ello, es recomendable siempre utilizar bloqueador y aplicarlo cada cuatro horas para evitar termine el efecto y quedar sin protección. Las cremas que contengan aromatizantes o sustancias agresivas como la lima o el limón son dañinas a la piel y generalmente ocasionan manchas color café conocidas como “paño” que son difíciles de quitar.
También es recomendable el uso de ropa clara y de algodón, además de sombrero y lentes con protector UV, que ayudan a evitar las molestas quemaduras.