- Vaticinan encontronazo Dany-Andrea por el Senado
- El espejismo del Partido Verde y de Tavo Borunda
- Retirarán concesiones a transportistas incumplidos
- Que ahora sí ya vienen los camiones del Juárez Bus
Muy cuesta arriba la tiene el nuevo delegado estatal del Instituto Mexicano del Seguro Social en Chihuahua, José Antonio Zamudio González, ya que el IMSS padece desde hace tiempo una enfermedad crónica degenerativa que afecta su buen funcionamiento para brindar un servicio de salud digno a miles derechohabientes y a sus familias.
Delegados van, delegados vienen y nada. El servicio de salud otorgado por el IMSS no mejora; la falta de medicinas, falta de camas para hospitalización, citas tardías con especialistas, malos tratos, diagnósticos tardados o erróneos, discriminación, entre otra sarta de quejas diariamente pululan por parte de los derechohabientes.
Bajo este panorama desolador del mayor prestador de servicios de salud otorgados por instituciones públicas, llegó a la delegación de Chihuahua el doctor Zamudio González.
El médico cirujano, quien fue titular de la representación Ciudad de México Norte del IMSS, tiene un reto difícil en la entidad que ninguno de los anteriores delegados ha sabido cumplir a cabalidad.
En este contexto este fin de semana, el nuevo delegado, visitó Ciudad Juárez. Recorrió las instalaciones del instituto y sostuvo encuentros con quienes dirigen este organismo en nuestra frontera.
Sin embargo, más allá de las justificaciones presentadas, esperamos que el fondo de esta visita sea para retomar el control que fue soltado por los últimos dos delegados anteriores, quienes permitieron que los niveles de corrupción se elevaran dentro del IMSS.
Sería deseable que, en esta visita, el doctor Zamudio González no solo se limitara a un turismo laboral. Es crucial que preste atención a las múltiples denuncias que existen en contra del IMSS, no solo en Ciudad Juárez, sino en todo Chihuahua. Un ejemplo de ello es el tema de las guarderías, servicios de urgencias y tráfico de influencias.
Los usuarios de los servicios médicos del Seguro Social esperan que el doctor Zamudio esté a la altura y que su gestión se caracterice por la transparencia, la eficiencia y el compromiso con la derechohabiencia a la que se debe.
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La carrera por el Senado en Chihuahua está en marcha y los contrincantes político-electorales de la dupla morenista, Juan Carlos Loera y Andrea Chávez, ya tienen contrincantes para disputar cada uno de los votos en los 67 municipios del estado.
Enfrentándose a ellos están los panistas Mario Vázquez Robles y Daniela Álvarez, quienes recientemente presentaron su solicitud de registro como precandidatos al Senado ante el Comité Directivo Estatal de Acción Nacional.
La rivalidad política entre las diputadas Chávez y Álvarez es palpable, y sus diferencias y disputas previas, incluyendo acusaciones de corrupción, solo añaden combustible al fuego. Con estos antecedentes, la campaña rumbo al Senado promete ser intensa y llena de sorpresas.
Los aspirantes no querrán perder la elección, por lo que los chihuahuenses seremos testigos de una “guerra” en la que seguramente habrá de todo. Sin embargo, más allá de las rivalidades y las tácticas de campaña, lo que está en juego es el futuro de Chihuahua y su representación en el Senado.
Por el lado de Acción Nacional, el comité de elecciones ya recibió los registros de Daniela Álvarez y Mario Vázquez. Durante una rueda de prensa, anunciaron que recorrerán cada municipio para escuchar y dialogar con los compañeros del partido, expresando su deseo de representar a Chihuahua desde el Senado y luchar para que el estado reciba el apoyo de la federación.
En el campo de Morena, Loera y Chávez también ya hicieron lo propio y van por la libre para alzarse con la candidatura. Recientemente fueron reconocidos por la candidata a la república Claudia Sheinbaum durante un acto masivo de proselitismo en la Ciudad de Cuauhtémoc.
Así que, señores, hagan sus apuestas. La carrera por el Senado en Chihuahua promete ser emocionante y llena de giros inesperados. Estaremos atentos a cómo se desarrollan los acontecimientos en los próximos meses.
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La reciente visita de Claudia Sheinbaum, a la ciudad de Cuauhtémoc, ha dejado un eco significativo. Uno de los aspectos más destacados fue el espaldarazo que la candidata a la presidencia de la república por Morena le dio al Partido Verde Ecologista de México (PVEM).
Este reconocimiento no solo fue público, sino que también se compartió en reuniones privadas, destacando los liderazgos en el estado de Chihuahua.
Jorge Esqueda Cano, coordinador municipal en Chihuahua y representante del PVEM en esta entidad, fue quien recibió este reconocimiento. Esqueda de la mano de Tavo Borunda han realizado un trabajo desde abajo; encontraron un partido político endeudado, sin militancia, sin recursos y sin mobiliario que dejó María Ávila.
Hoy, se asegura que ya son casi 20 los comités municipales renovados y se ha realizado un trabajo de cercanía con los chihuahuenses.
El PVEM va en alianza con Morena para el proceso federal, pero no en lo local. Según Borunda, planean jugar solos para obtener el mínimo de la votación válida por el Instituto Estatal Electoral y con ello acceder a las jugosas prerrogativas. Ya salió el peine.
No todo es miel sobre hojuelas para Tavo, el que verdaderamente mueve los hilos del partido, los “grillos” de Chihuahua ya verán si es capaz de mantener el resurgimiento y consolidarse como una fuerza política en la entidad. Es importante señalar que este proceso de levantar al partido aún es incipiente y ellos enfrentan varios retos.
Uno de los principales retos es la falta de una estructura sólida. El PVEM en Chihuahua pasó por una crisis en los últimos años, que lo llevó a perder su registro como partido político. El trabajo de Esqueda y Borunda ha logrado revertir esta situación, pero aún queda mucho por hacer para consolidar una estructura fuerte y eficiente.
Sin lugar a duda Tavo Borunda tiene también una oportunidad de emerger con un liderazgo, claro, reconocido y efectivo. Al tiempo, con el beneficio de la duda.
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El anuncio del gobierno del estado de Chihuahua de que cancelará 234 concesiones de transporte público en Ciudad Juárez ha generado un debate entre los ciudadanos fronterizos. La calidad del servicio de transporte es un tema que preocupa a todos, y las opiniones sobre la medida son variadas.
Hay quienes consideran que esta medida es necesaria para mejorar la calidad del servicio, que en la actualidad es deficiente. Sin embargo, también hay quienes creen que al gobierno del estado le falta decisión y contundencia para mejorar el servicio en todos los sentidos, y no solo retirando concesiones.
La decisión del gobierno se basa en el hecho de que muchas de las concesiones no cumplen con los requisitos establecidos en la ley. Por ejemplo, hay camiones que no cuentan con las condiciones mínimas de seguridad o que no están prestando el servicio de manera regular. Es el caso de las empresas Lazo 5 Puntos y Transporte Ceiba, que tienen prestadas siete unidades para operar a medias el Juárez Bus en la línea troncal 2 del BRT.
Si bien es cierto que la cancelación de las concesiones puede ayudar a mejorar la calidad del servicio, es importante que el gobierno tenga un plan para garantizar que los usuarios tengan un transporte alternativo. De lo contrario, la medida podría generar un caos en el sistema de transporte público de la ciudad.
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Por otro lado, el secretario general del Gobierno, Santiago de la Peña, anunció recientemente que ya vienen los camiones para la red de transporte semimasivo de Juárez y Chihuahua. Los fronterizos han estado esperando estas unidades con ansias porque la infraestructura del BRT 2, que se creó en el anterior gobierno estatal de Javier Corral, no funciona precisamente por la falta de camiones.
A la llegada del actual gobierno estatal encabezado por la gobernadora Maru Campos, hasta ahora no ha cumplido su promesa de echar a jalar el transporte público del BRT. Sin embargo, parece que eso será cosa del pasado porque a finales del próximo mes ya estarán por lo menos 30 camiones nuevos en Juárez para dar el servicio que merecen los juarenses, así lo prometió Santiago de la Peña.
El futuro del transporte público en Ciudad Juárez está en juego. Los ciudadanos esperan mejoras significativas y soluciones efectivas. Solo el tiempo dirá si las promesas se cumplen y si las medidas tomadas conducen a un servicio de transporte público eficiente y de calidad del que la Ciudad ha carecido por años.
