Al menos 40 personas resultaron heridas el lunes cuando un vuelo de Air Europa de Madrid a Montevideo sufrió fuertes turbulencias, lo que provocó un aterrizaje de emergencia en Brasil. El avión, un Boeing 787-9 Dreamliner con 325 pasajeros a bordo, aterrizó a las 02:32 locales (23:32 del lunes, hora de Ciudad de México) en el aeropuerto internacional de Natal, en el noreste de Brasil, donde lo esperaba una quincena de ambulancias, informaron autoridades.
Cuarenta personas fueron llevadas a centros de salud de Natal en su mayoría por ‘escoriaciones y traumatismos leves’, dijo a la AFP la secretaría de salud del estado brasileño de Rio Grande do Norte.
Once permanecían hospitalizadas el lunes por la tarde, cinco en clínicas privadas y seis en el hospital Monsenhor Walfredo Gurgel. Entre los heridos hay nacionales de España, Argentina, Uruguay, Israel, Bolivia y Alemania.
Air Europa informó más temprano que decidió desviar el vuelo UX045 a Natal ‘debido a un episodio de fuertes turbulencias’, que dejó ‘7 heridos de diversa consideración, así como un número aún indeterminado por contusiones leves”.
La aeronave ‘aterrizó con total normalidad’, pero ‘permanecerá en revisión para determinar el alcance de los daños registrados’, indicó en un comunicado. Añadió que enviaría ‘en las próximas horas’ un avión para recoger a los pasajeros afectados.
“Pensamos que íbamos a morir” La aerolínea añadió que el avión estaba siendo revisado para determinar el alcance de los daños, y dijo en un mensaje en las redes sociales el martes que un vuelo de reemplazo para llevar a los pasajeros a Montevideo había salido de Natal a primera hora del día. Air Europa anunció más tarde que los pasajeros eran trasladados a Recife, unos 290 kilómetros al sur de Natal, ‘donde se alojarán y luego viajarán a Montevideo’.
‘Hay pasajeros con fracturas y heridas en brazos, cara y piernas’, dijo Stevan a Reuters TV en la ciudad brasileña de Natal, donde el vuelo UX045 procedente de Madrid y con destino a la capital uruguaya, Montevideo. ‘Fue una sensación horrible. Pensamos que íbamos a morir allí’, dijo, sin dar su nombre completo. Claudio Fernández Arbes, un psicólogo uruguayo de 43 años narró a la AFP el incidente.
‘No fue una turbulencia, fue una caída en picada. No es que el avión se sacudió: cayó’, relató. Cuando la aeronave se estabilizó, ‘se sintió como un choque de tránsito’. Muchos fueron golpeados por personas o cosas que volaron, un niño de dos años quedó atrapado en los compartimentos para maletas, otros pasajeros quedaron suspendidos y se lastimaron al caer.
‘Fue una locura’, dijo Fernández Arbes al describir la escena, con pasajeros ensangrentados y gritando. ‘Fueron unos pocos segundos de terror absoluto y después unos minutos larguísimos de incertidumbre y desesperación’, agregó. Fernández Arbes relató que un pasajero sufrió un perinfarto y una mujer se quebró la cadera. Entre los pasajeros había médicos que asistieron a varios heridos, explicó.
‘La peor parte fue el martirio de esos 40-50 minutos hasta Natal en que no sabíamos qué iba a pasar. En un momento dijeron que íbamos a seguir hasta Montevideo y la gente empezó a protestar’, contó.
Este accidente tuvo lugar menos de dos meses después de que un pasajero murió y decenas resultaran heridos cuando las turbulencias afectaron a un vuelo de Singapore Airlines de Londres a Singapur. Una semana después, 12 personas se lesionaron durante turbulencias en un vuelo Boeing 787-9 de Qatar Airways de Doha a Irlanda.
Reuters