Corral a un paso del fuero y amenaza a Maru
El PRI, un partido moribundo y nostálgico
Alito prepara reingeniería completa al PRI
¿AMLO se va con conciencia tranquila?
El alcalde de Juárez, Cruz Pérez Cuéllar, inició una gira por varios municipios del estado, donde entregó camiones recolectores de basura que ya no se utilizaban en la frontera. Con esta acción, sembró expectativas y simpatías entre sus compañeros de partido y la ciudadanía, de cara al próximo proceso electoral por la grande del estado.
Así lo interpretaron algunos grillos de café, que ven en el recorrido de Cruz una estrategia para posicionarse como el posible candidato a gobernador de Morena. Pérez Cuéllar no ha negado tener aspiraciones futuras, pero por lo pronto de esta gira ha dicho que solo busca apoyar a los alcaldes que enfrentan problemas de servicios públicos. Ajá.
El aspirante a palacio estatal sabe bien que quien siembra en el lugar correcto, cuida su siembra y conoce lo que siembra, sacará buena cosecha en los tiempos correctos.
Algunos observadores políticos consideran que Pérez Cuéllar está aprovechando su popularidad y su capital político para hacerse visible en el resto del estado, donde Morena no tiene la misma fuerza que en Juárez.
Así, en el futuro, en los tiempos de las encuestas internas de Morena estaría enviando un mensaje a sus posibles contendientes internos y externos de que él es el mejor posicionado para encabezar el proyecto de la Cuarta Transformación en Chihuahua.
Conforme se acerque el 2027 veremos muchos viajes de Cruz Pérez Cuéllar por todos los municipios del estado; mientras que otros aspirantes a la misma silla no se animan a hacer lo mismo, es el caso de Marco Bonilla que ni de chiste se asoma por Ciudad Juárez en donde reina Morena.
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Vaya descaro del paseño Javier Corral Jurado, quien luego de permanecer escondido en su madriguera en la Ciudad de México, ayer se vio obligado a salir con amparo bajo el brazo para acudir al Senado para registrarse como senador.
Tras su registro, Corral lanzó amenazas a la gobernadora Maru Campos y dijo: “será mi empeño, limpiar mi nombre de las patrañas y mezquindad a las que ha recurrido en mi contra María Eugenia Campos, desenmascararé sus mentiras y exhibiré la enorme corrupción que sigue enlodándola”.
Lo que debería hacer el exgobernador de Chihuahua es atender su asunto en el que se le implica por el desvío de 98 millones de pesos antes de obtener el fuero y no después de adquirirlo. De dientes para afuera Corral dice que no se amparará con el fuero para responder a los señalamientos en su contra. ¡Vaya descaro! insisten muchos.
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El pasado fin de semana en chihuahuitas tierras hubo un evento que pasó muy desapercibido para los medios de comunicación; se trató de un encuentro de viejos lobos priístas a los que ahora solo les queda la nostalgia del poder que tuvieron con el otrora partidazo tricolor.
Juntos Dulce María Sauri, Fernando Baeza, José Reyes Baeza, Pedro Joaquín Coldwell, León Natividad González Parás y José Encarnación Alfaro, en los tiempos de gloria del PRI juntos hubieran levantado una tormenta de arena, ahora no lograron ni un ligero remolinito.
Los exgobernadores escogieron Chihuahua para pegar el grito en el cielo y expresar su rechazo a la gestión de Alejandro “Alito” Moreno quien, por cierto, sigue al frente del partido a la mala.
Bajo el nombre de Frente Amplio de Renovación por México, los exlíderes acusaron a “Alito” de trabajar para Morena y de violar los estatutos priístas al prolongar su mandato.
Los exgobernadores se aventaron buena narrativa, pero sus voces no fueron muy mediáticas, ni hicieron eco en los chihuahuenses que muy poco les importa lo que suceda en el Revolucionario Institucional.
Todos se volcaron en apoyo al senador Manlio Favio Beltrones quien fue echado por Alito fuera de la fracción parlamentaria del PRI en el Senado. Los exgobernadores se mostraron muy pesimistas y casi casi adelantaron la muerte del PRI que, en el pasado, era el rey del sistema de partidos en el país.
Al final del día, la reunión solo fue un triste reflejo de la decadencia y la desesperación de unos priístas que se niega a aceptar su derrota y su irrelevancia en la escena política nacional.
Lo que pretendía ser un acto de rebeldía y de renovación terminó siendo una muestra de impotencia y de nostalgia. El PRI está moribundo y ellos, aunque no lo acepten, son los responsables de su agonía.
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Mientras tanto Alejandro “Alito” Moreno Cárdenas ni sufre, ni se acongoja y ya tiene lista la segunda fase de su plan para hacer una reingeniería completa al PRI.
A nivel nacional ha trascendido que el gandalla de “Alito” tiene en mente cambiar no solo la imagen, sino también los estatutos y la estructura del tricolor, según el campechano para hacer más competitivo al partido en futuras elecciones.
Muchos priístas que no están de acuerdo con Moreno Cárdenas, ven con escepticismo las propuestas y consideran un intento del dirigente partidista por perpetuarse en el poder y negociar con el gobierno federal que ahora estará a cargo de Claudia Sheinbaum.
Y como es natural en este tipo de agandalles hay inconformidad entre las bases y los sectores del partido, que se sienten marginados y traicionados por la cúpula liderada por “Alito”.
Por lo pronto, Alejandro Moreno ya amarró lo suyo tanto en el partido como en el Senado y este lunes muy mono recogió su credencial como senador y le cerró de nueva cuenta la puerta de la bancada al senador sonorense Manlio Favio Beltrones. Así las cosas, entre priístas que fieles a su estilo se siguen destruyendo políticamente.
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A 33 días de que Andrés Manuel López Obrador se vaya a… su rancho, ya empezó a bombardear a los mexicanos con spots y propaganda con motivo de su último informe de gobierno y fin de su sexenio.
En medios convencionales y las redes sociales se publican los mensajes de el aún presidente y destaca su frase: “Me voy con mi conciencia tranquila”.
La cuenta regresiva para la conclusión del mandato de AMLO está a punto de iniciar, por lo que sus colaboradores de comunicación y marketing lanzan los comerciales de los principales logros de su gobierno cuatroteísta.
Vale recordar que el 1 de septiembre será el sexto y último Informe de gobierno y su último día en el poder el 30 de septiembre. A la par de la oleada de spots, en los medios continúa la polémica por la reforma judicial y la desaparición de organismos autónomos.
Y para cerrar el círculo, el gobierno de México instaló ya la mesa para la transición de gobierno, la cual fue integrada por la actual secretaria de gobierno Luisa María alcalde y su homóloga Rosa Icela Rodríguez.
Ayer se dio la primera reunión de los integrantes del gobierno en funciones y el entrante de Claudia Sheinbaum. Vaticinan una transición inédita, ordenada, transparente y eficaz entre dos gobiernos que forman parte de un mismo proyecto político partidista e ideológico de izquierda.
