El secretario de Estado del Vaticano, el cardenal Pietro Parolin, pidió este sábado (28.09.2024) a las autoridades de Nicaragua que respeten la libertad de culto tras la represión del gobierno contra miembros de la Iglesia católica en el país.
La Santa Sede está «particularmente preocupada» con «las medidas adoptadas contra el personal y las instituciones de la Iglesia, que afectan directamente la sensible cuestión de la libertad religiosa», dijo el religioso en la Asamblea General de la ONU en Nueva York.
Parolin instó al gobierno de Daniel Ortega a que «garantice adecuadamente esta libertad junto con otros derechos fundamentales», antes de manifestar la disposición del Vaticano a entablar un «diálogo respetuoso y constructivo» con las autoridades del país.
El régimen de Ortega expulsó el pasado 7 de agosto a siete sacerdotes nicaragüenses del país.
Ortega y su esposa Rosario Murillo acusan a la Iglesia católica de apoyar las protestas de 2018 contra el gobierno, que dejaron más de 300 muertos, según la ONU, y que Managua considera un intento de golpe de Estado patrocinado por Washington.
Desde abril de 2018 hasta marzo de 2024, se habrían producido al menos 73 detenciones arbitrarias de miembros de la Iglesia católica y otras confesiones cristianas, según el periodista nicaragüense Emiliano Chamorro, exiliado en Estados Unidos.
El gobierno de Ortega excarceló en enero a dos obispos católicos, entre ellos Rolando Álvarez y otros religiosos, y los envió a Roma.
DW