Andreas Münzhuber, un líder neonazi del partido de extrema derecha ‘La Tercera Vía’, falleció el pasado 29 de septiembre tras caer más de 60 metros durante una excursión en el monte Untersberg, en Baviera, Alemania. Esta montaña es conocida por su conexión histórica con Adolf Hitler y es venerada por grupos neonazis.
Münzhuber, de 37 años, perdió el equilibrio al pisar una raíz húmeda mientras descendía con un grupo internacional de excursionistas. La caída lo llevó a golpearse repetidamente con rocas hasta quedar malherido en el fondo de una zona conocida como Dongus-Marterl.
A pesar de los esfuerzos de sus compañeros, que incluían un médico y un policía, no lograron salvar su vida. Cuando llegaron los servicios de emergencia, Münzhuber ya no presentaba signos vitales, por lo que solo pudieron certificar su fallecimiento.
Lder radical con peso en Baviera
Andreas Münzhuber era una figura prominente en ‘La Tercera Vía’, un grupo ultranacionalista conocido por su ideología xenófoba y vínculos con actos de violencia. Como tesorero y asesor regional del partido, Münzhuber tenía gran influencia en Baviera, una región donde el grupo mantiene una activa presencia.
El monte Untersberg, donde ocurrió el incidente, tiene un significado especial para los simpatizantes del nazismo, ya que Hitler lo contemplaba desde su residencia en Obersalzberg. Por ello, muchos extremistas lo consideran un lugar de peregrinación.
Ahora, algunos en círculos radicales afirman que Münzhuber ha seguido «a su líder por la eternidad». Sin embargo, su muerte también representa la pérdida de uno de los actores más activos de un movimiento que continúa siendo objeto de vigilancia y condena en Alemania.