Las fugas que afectaron a los gasoductos Nord Stream que conectan Rusia y Alemania son un «acto de terrorismo internacional», denunció el miércoles el presidente ruso, Vladimir Putin, asegurando que este incidente beneficia a Estados Unidos, Polonia y Ucrania.
«Los beneficiados están claros (…) Puesto que (este incidente) refuerza la importancia geopolítica de los sistemas de gas restantes, el que pasa por el territorio de Polonia (…) y de Ucrania, y que Rusia construyó asumiendo el costo. Pero también a Estados Unidos, que ahora puede entregar su energía a precios elevados», afirmó Putin durante un foro sobre energía.
El presidente ruso consideró este miércoles que la «pelota está en el tejado» de la Unión Europea (UE) en cuanto a la reanudación del suministro del gas ruso a través sistema del ducto Nord Stream 2, que no se vio afectado por las explosiones.
«Rusia está lista para retomar las entregas» a través de ese tubo submarino que nunca se puso en funcionamiento a causa de la ofensiva en Ucrania, dijo Putin durante el foro sobre energía.
«La pelota está en el tejado de la UE, si quiere, no tiene más que abrir el grifo», declaró Vladimir Putin y añadió que los otros gasoductos del sistema Nord Stream no se repararían si no se garantizaba su uso.
Milenio