Miles de personas seguían bajo órdenes de evacuación el sábado luego de que un incendio forestal avivado por el viento arrasó una zona rural del norte de California, causando heridos y daños en un número indeterminado de viviendas.
El fuego, que se inició el viernes por la tarde dentro o cerca de un aserradero, se extendió rápidamente a un vecindario en el extremo norte de Weed, pero más tarde las llamas se alejaron de la ciudad de cerca de 2 mil 600 habitantes.
Los evacuados contaron que había mucho humo y que del cielo caían trozos de ceniza.
Annie Peterson contó que estaba sentada en el porche de su casa, cerca de Roseburg Forest Products, que produce chapas de madera, cuando “de pronto oímos un gran estruendo y el humo vino hacia nosotros”.
Rápidamente, su casa y cerca de una docena más estaban en llamas. Los miembros de su iglesia le ayudaron a ella y a su hijo, que tiene problemas de movilidad, a salir, agregó añadiendo que la escena de humo y llamas parecía “el fin del mundo».
Suzi Brady, una vocera del Departamento Forestal y Protección contra Incendios de California (CAL FIRE, por su acrónimo en inglés), informó que varias personas resultaron heridas.
Rebecca Taylor, directora de comunicación de Roseburg Forest Products, con sede en Springfield, Oregon, dijo que por el momento no estaba claro si el fuego comenzó cerca o dentro de la propiedad de la empresa. Un edificio vacío que estaba en un extremo del complejo ardió, añadió apuntando que todos los empleados fueron evacuados y no se reportaron heridos.
El incendio, denominado Mill, se vio avivado por vientos de 56 km/h (35 mph) y pronto arrasó 10,3 kilómetros cuadrados (4 millas cuadradas) de terreno.
Las llamas avanzaron rápidamente por la hierba seca, la maleza y la madera. Unos 7 mil 500 residentes en Weed y en comunidades próximas tenían orden de evacuar la zona.
El gobernador de California, Gavin Newsom, declaró el estado de emergencia en el condado de Siskiyou y dijo que recibió fondos federales “para ayudar a garantizar la disponibilidad de recursos vitales para extinguir el fuego”.
Casi a la misma hora de inicio del fuego se registraron cortes de electricidad que afectaron a unos 9 mil clientes, y varios miles seguían sin luz por la noche, según una web de apagones de la empresa eléctrica PacifiCorp, que dijo que la situación se debía al incendio.
Es el tercer gran incendio registrado en otros tantos días en California, que sufre una prolongada sequía y una ola de calor que se espera que acerque los termómetros a los 38 grados Celsius (unos 100 Fahrenheit) en muchas zonas durante el fin de semana del Día del Trabajo.
Los científicos afirman que el cambio climático ha hecho que el oeste del país sea más cálido y seco en la últimas tres décadas, y seguirá haciendo que el clima sea más extremo y los incendios más frecuentes y destructivos. En los cinco últimos años, California ha sufrido los incendios más grandes y destructivos de su historia.
LaJornada
