Brasilia, Brasil – La situación judicial del expresidente brasileño Jair Bolsonaro (2019-2022) se complica aún más. Un juez de la Corte Suprema de Brasil, Alexandre de Moraes, advirtió este lunes al exmandatario sobre la posibilidad de decretar su prisión inmediata debido al incumplimiento de la prohibición de manifestarse en redes sociales.
Bolsonaro, quien desde la semana pasada está obligado a usar tobillera electrónica y otras medidas cautelares en el marco de una investigación por presunta obstrucción a la justicia, realizó declaraciones a los medios este lunes en el Congreso. Estas intervenciones fueron rápidamente replicadas en plataformas como X, Instagram y Facebook por sus hijos, aliados y diversos medios de comunicación, lo que motivó la dura advertencia judicial.
Según el documento judicial al que accedió AFP, el juez Moraes señaló que el exmandatario, de 70 años, “pronuncia un discurso para ser mostrado en las plataformas digitales” y exigió a sus abogados una aclaración en un plazo de 24 horas sobre el incumplimiento de las medidas cautelares, bajo pena de decretar su prisión. Anteriormente, Moraes ya había advertido que cualquier difusión de intervenciones públicas de Bolsonaro en redes constituiría una violación.
A pesar de la advertencia, Bolsonaro denunció el hecho como un acto de “cobardía” en su contra y, ante las cámaras, mostró por primera vez la tobillera electrónica en su pie izquierdo, calificándola como un “símbolo de la máxima humillación”. “Lo que vale para mí es la ley de Dios”, añadió en rechazo a las decisiones judiciales. La Corte Suprema, en una sesión virtual, decidió mantener las restricciones impuestas por Moraes con cuatro votos a favor y uno en contra.
La situación ha escalado incluso a un conflicto diplomático con Estados Unidos. El expresidente Donald Trump anunció aranceles del 50% a las exportaciones brasileñas a partir de agosto, acusando una “caza de brujas” contra su aliado y pidiendo a Brasil que “cambie de rumbo”. Por su parte, el presidente Luiz Inácio Lula da Silva calificó la postura estadounidense como un “chantaje inaceptable”.
Moraes justificó las restricciones sobre Bolsonaro acusándolo de incitar “actos hostiles” de Estados Unidos contra Brasil para obstruir el juicio que enfrenta por la presunta intentona golpista de 2022. Además de la tobillera y la prohibición de redes, el juez ordenó al exmandatario no acercarse a embajadas ni a autoridades extranjeras y permanecer en casa por las noches y fines de semana.