El Departamento de Justicia de EE. UU. ha acusado a Takeshi Ebisawa, líder de la Yakuza japonesa, de intentar traficar material nuclear, incluyendo uranio y plutonio, desde Birmania a Irán.
Se alega que Ebisawa negoció la venta de material nuclear para uso en el desarrollo de armas nucleares.
La acusación destaca la gravedad del caso, considerándolo un ejemplo extremo de la depravación de narcotraficantes que actúan sin consideración por la vida humana.
Ebisawa y su coacusado enfrentan penas de diez años a cadena perpetua.