yahoo.com-El paso del huracán Otis en Acapulco causó daños inmensos que todavía no terminan de dimensionarse. Y en ese recuento, hay más de 600 perritos que han sido afectados. Los trabajos no se detienen y fue así que la Brigada de Vigilancia Animal, de la Secretaría de Seguridad Ciudadana de la Ciudad de México, rescató a un grupo de canes que estaban atrapados debajo de una lancha.
La Secretaría informó que los animales rescatados padecían desnutrición, por lo que serán llevados a un albergue de la propia Brigada. La situación ha sido muy crítica para los perritos. Se estima que el paso de Otis provocó la muerte de unos 60. Además, en la Brigada se han atendido a más de 600 perros. Acusan diferentes problemas: lesiones provocadas por golpes, dificultades digestivas y respiratorias. Los emisarios de la Secretaría de Seguridad también han apoyado a la reconstrucción de la ONG Patitas Felices, encargada de rescatar perros y darlos en adopción, cuya labor era ya muy reconocida desde antes del huracán.
Durante las semanas posteriores a que Otis pisara tierra, y comenzaran las labores de ayuda para damnificados, se han recolectado cuatro toneladas de alimento para perro, el cual ha sido distribuido en colonias como Vista Hermosa, Icacos, Renacimiento, Costa Azul, La Costera y Punta Diamante. Y la solidaridad no se ha hecho esperar. En el Estado de México, por ejemplo, se habilitó un centro de acopio de comida para animales de compañía, que está ubicado en el Palacio de Gobierno —estuvo activo hasta el 31 de octubre—.
También ha habido iniciativas virales como la del personaje Zadrigman, conocido como el superhéroe de los animales, que organizó una recolección en la Ciudad de México. El resultado fue grandioso: un total de cinco toneladas de alimentos y agua para mascotas. Y asimismo hubo espacio para historias conmovedoras en Acapulco mismo, como la de un pastor belga que justamente fue nombrado como Otis, por locatarios de tiendas. El can llegó después del paso del huracán y el cuidado ha sido recíproco: estaba lastimado, lo han atendido como se puede, aunque tiene lesiones en una patita y en el ojo. Y ahora él cuida y ladra cuando ve que alguien quiere entrar a alguna tienda.