Cerca de 50 personas han fallecido en los últimos días en Estados Unidos por el impacto de la gélida tormenta Elliot, que ha dejado intensas nevadas y vientos huracanados en gran parte del país, provocando las Navidades más frías de las últimas décadas en ese país.
La zona más devastada es el noroeste del estado de Nueva York, donde las autoridades elevaron este lunes a 27 el número de muertos por el temporal. Los cuerpos fueron hallados en casas, vehículos y en la calle.
La ciudad de Búfalo (Nueva York), fronteriza con Canadá y acostumbrada al frío, ha quedado totalmente colapsada por la nieve y su aeropuerto permanece cerrado.
Ante esto, la gobernadora de Nueva York, Kathy Hochul, solicitó a la Casa Blanca que se declare el noroeste del estado como zona catastrófica. En una rueda de prensa enfatizó lo importante de esta medida para hacer frente a los costes y gastos ocasionados por la tormenta.
En su intervención, la gobernadora agregó que, aunque la situación es mejor, todavía se espera que caigan entre 15 y 30 centímetros de nieve en el sur del condado de Erie, cuya capital es la ciudad de Búfalo.
“La situación no es mala como en el último par de días, pero sigue siendo una situación peligrosa para estar fuera. Quédense en casa hasta mañana”, insistió Hochul, que calificó la tormenta como “única en una generación”.
Según las autoridades locales, todavía hay 12 mil viviendas sin electricidad en la ciudad, donde cuatro subestaciones eléctricas resultaron dañadas por el paso de la tormenta.
El alcalde de Búfalo, Byron Brown, aseguró que su casa fue una de las que sufrió cortes de luz y explicó que estuvo a 4 grados centígrados con varios miembros de su familia, incluidos dos menores.
Brown también hizo referencia durante su intervención a la existencia de saqueos en la ciudad y la detención de algunas personas.
“Entendemos perfectamente las dificultades por las que están pasando tantas familias y la frustración a la que se enfrentan. Hay 18 muertos en Búfalo: en las calles, se desorientaron y murieron; gente que murió en coches y en casas”, dijo Brown antes de subrayar que es una situación “muy difícil y peligrosa”.
Por su parte, la máxima autoridad del condado de Erie, Mark Poloncarz, subrayó que la oficina del forense ha confirmado la muerte de 25 personas, once de ellas durante la pasada noche, aunque advirtió de que este número será más elevado.
Además de Nueva York, se han registrado fallecimientos por el frío o por accidentes en los estados de Colorado, Illinois, Kansas, Kentucky, Míchigan, Misuri, Nebraska, Ohio, Oklahoma, Tennessee y Wisconsin, según los medios locales.
En Ohio, cuatro personas murieron y varias resultaron heridas en un aparatoso accidente en una autopista en el que estuvieron involucrados unos 50 vehículos.
El alcance de la tormenta ha sido casi sin precedentes, extendiéndose desde los Grandes Lagos, cerca de Canadá, hasta el río Grande (río Bravo) a lo largo de la frontera con México.
Más de 200 millones de estadounidenses, alrededor del 60% de la población, se ha enfrentado a algún tipo de aviso o advertencia relacionado con el clima invernal y las temperaturas cayeron drásticamente por debajo de lo normal desde el este de las Montañas Rocosas hasta los Apalaches.
“Gran parte del este de Estados Unidos seguirá congelado este lunes y comenzará una tendencia a la moderación el martes”, informó este lunes el servicio meteorológico nacional, el National Weather Service (NWS).
El organismo advirtió que en algunas zonas sigue siendo “peligroso” viajar por carretera a raíz de la nieve, pero pronosticó que las condiciones mejorarán dentro de un par de días.
Los responsables volvieron a insistir con vehemencia en que continúa vigente la prohibición de circular con vehículos por las calles y explicaron que hay decenas de automóviles abandonados y apilados que están entorpeciendo las labores de rescate.
Elliot también provocó miles de retrasos aéreos y la cancelación del 20% de los vuelos en la víspera de Nochebuena y Navidad, cuando miles de personas intentaban reencontrarse con sus familias.
Las interrupciones de los viajes continuaban el lunes, cuando las aerolíneas cancelaron más de 2 mil 500 vuelos a primera hora de la tarde, según el sitio web de seguimiento FlightAware.
Los retrasos de vuelos dentro de Estados Unidos y de salida del país llegaban a más de 4 mil 500 a primera hora de la tarde, según FlightAware.
La ventisca, considerada la peor en el área en 45 años, se formó a última hora del viernes y azotó el oeste de Nueva York durante los festejos de Navidad. La tormenta invernal procedente del Ártico se ha extendido sobre la mayor parte de Estados Unidos durante días, afectando incluso la frontera con México.
Aristegui