Un volcán en la turística isla de Flores, Indonesia, volvió a entrar en erupción, obligando a las autoridades a elevar la alerta al nivel máximo. La explosión del monte Lewotobi Laki-Laki, de 1,703 metros de altura, ocurrió la noche del jueves y lanzó cenizas a más de 8,000 metros de altura.
El fenómeno comenzó a las 22:56 horas (local) y duró 11 minutos y 9 segundos, según reportes oficiales. Aunque no se han reportado daños inmediatos en las comunidades cercanas, los expertos advierten sobre posibles deslaves de lodo volcánico debido a las intensas lluvias.
El estruendo de la erupción fue tan fuerte que pudo escucharse a más de 80 kilómetros de distancia, en la localidad de Maumere, y en Larantuka, a más de 50 kilómetros. Este evento ha generado pánico entre los habitantes de la región, quienes han sido testigos de la furia de la naturaleza.
Las autoridades han impuesto una zona de exclusión de 7 a 8 kilómetros alrededor del volcán, mientras la actividad sigue bajo estricta vigilancia. La erupción de noviembre pasado ya había dejado un saldo trágico de nueve muertos, cancelaciones de vuelos en Bali y miles de evacuados.
Indonesia, situada en el “Cinturón de Fuego” del Pacífico, es una de las zonas de mayor actividad volcánica y sísmica en el mundo. Erupciones históricas como las del Tambora en 1815 y el Krakatoa en 1883 han dejado cicatrices imborrables en el país y en la historia de la humanidad.
Mientras la alerta se mantiene en su nivel más alto, los científicos monitorean la actividad del Lewotobi Laki-Laki, temiendo que este desastre natural aún no haya terminado. ¿Estamos ante una catástrofe mayor?
¡Astronautas regresan envejecidos tras quedar varados en el espacio!
Después de 286 días varados en la Estación Espacial Internacional (EEI), los astronautas Barry “Butch” Wilmore y Sunita Williams regresaron a la Tierra con un inquietante cambio: su cabello estaba completamente encanecido. Su larga estadía no programada en el espacio provocó graves afectaciones en sus cuerpos, alertando a la comunidad científica sobre los efectos extremos de la gravedad cero.
El retorno de los astronautas fue un espectáculo seguido por decenas de espectadores, quienes no tardaron en notar la transformación. Más allá de las canas, ambos científicos lucían notablemente frágiles, lo que desató preocupaciones sobre su salud.
Investigaciones previas han señalado que la exposición prolongada al espacio puede causar alteraciones genéticas, pérdida de densidad ósea y muscular, e incluso envejecimiento acelerado. La NASA ha advertido que los vuelos espaciales afectan el sistema inmunológico de manera similar al proceso de envejecimiento en la Tierra.
Un estudio de 2016 sugirió que la ingravidez altera la expresión genética de los folículos pilosos, lo que podría explicar el repentino encanecimiento. Además, el estrés oxidativo inducido por los viajes espaciales es otro factor que podría haber acelerado el envejecimiento visible en los astronautas.
Sin embargo, algunos expertos sugieren que la explicación más sencilla es la falta de tinte para el cabello en el espacio. A pesar de esto, los efectos fisiológicos de su estadía en la EEI están siendo estudiados con detalle mientras ambos astronautas comienzan un largo proceso de recuperación en la Tierra.
El incidente con la nave Boeing Starliner, que originalmente debía regresar después de solo una semana, pone en tela de juicio la seguridad de las misiones espaciales. ¿Es posible que el espacio esté envejeciendo prematuramente a los astronautas?
