Una mujer de 44 años ha sido arrestada en Trípoli, Grecia, tras confesar haber iniciado incendios forestales deliberadamente con la esperanza de conocer y coquetear con bomberos. La mujer, que no ha sido identificada públicamente, encendió al menos dos incendios en tierras agrícolas los días 24 y 25 de agosto.
El rápido accionar de los bomberos evitó daños graves, pero la presencia sospechosa de la mujer en ambos incendios levantó las alarmas. Tras ser interrogada, confesó que su motivación para provocar los incendios era el deseo de interactuar con los bomberos que acudían a apagarlos.
La mujer fue condenada a 36 meses de prisión y multada con mil euros. El incidente ha generado indignación en la comunidad local, ya que los incendios pudieron haber escalado si no fuera por la rápida intervención de los servicios de emergencia.
Este incidente ha resaltado la importancia de la vigilancia en áreas propensas a incendios, especialmente durante los veranos calurosos, cuando el riesgo de incendios forestales es mayor. Afortunadamente, en este caso, la intervención oportuna evitó una tragedia mayor.
