Un grupo de pasajeros del crucero de lujo SH Diana, perteneciente a Swan Hellenic, protagonizó una huelga de hambre tras una falla mecánica que arruinó su ansiado viaje a la Antártida. El incidente ocurrió en el día 14 de un itinerario de 21 días, dejando al barco sin llegar a su destino principal y dirigiéndose a Ushuaia para reparaciones.
El crucero, conocido por sus instalaciones de lujo como una sauna panorámica y un restaurante de clase mundial, había prometido una experiencia inolvidable con boletos que costaban entre 182 mil y 260 mil pesos mexicanos. Sin embargo, el sueño de avistar glaciares y pingüinos se esfumó, dejando lugar a la frustración entre los pasajeros.
La situación se tensó cuando un grupo de pasajeros rusos inició una huelga de hambre para exigir mejores compensaciones. Según testigos, “las cosas se pusieron feas” a bordo. Swan Hellenic ofreció reembolsos del 50% y créditos del 65% para futuros viajes, pero algunos viajeros consideran insuficiente la medida.
Andrea Zito, director ejecutivo de Swan Hellenic, lamentó el cambio de itinerario y calificó la protesta como contraproducente. Afirmó que la mayoría de los pasajeros aceptó la compensación, aunque reconoció que aún enfrentan descontento.
El SH Diana, relanzado en 2020 como parte de las expediciones no convencionales de Swan Hellenic, enfrenta ahora no solo reparaciones técnicas, sino también el reto de restaurar su reputación.