Donald Trump, presidente electo de Estados Unidos, informó que tiene previsto viajar a Los Ángeles durante su primera semana en el cargo para visitar las áreas devastadas por los incendios que han causado graves pérdidas humanas y materiales.
En una entrevista con la cadena NBC News este sábado, Trump señaló que originalmente planeaba realizar el viaje antes de asumir la presidencia, pero decidió posponerlo: “Es un poco más apropiado hacerlo como mandatario”, comentó. Su visita se espera a finales de la próxima semana, después de su investidura oficial el lunes.
Los incendios, que comenzaron el pasado 7 de enero, han tenido un impacto severo en la región, cobrando la vida de al menos 25 personas. Además, miles de residentes han sido evacuados mientras los equipos de emergencia luchan por contener el fuego.
Las autoridades han señalado que será necesario más tiempo para controlar la situación, y los residentes desalojados podrían tener que esperar una semana o más antes de poder regresar a sus hogares.
Desde el inicio del desastre, Trump ha dirigido fuertes críticas al gobernador de California, Gavin Newsom, señalándolo como responsable de lo que considera una mala gestión de la crisis.
Entre las acusaciones, el presidente electo destacó que las políticas medioambientales del gobernador han sido una prioridad por encima de la seguridad pública. Incluso pidió públicamente la renuncia de Newsom, lo que ha generado debates entre distintos sectores políticos.
El viaje de Trump tiene como propósito evaluar personalmente los daños ocasionados por los incendios y reunirse con las autoridades locales, así como con los equipos que trabajan en el control del fuego.
Aunque todavía no se ha anunciado una agenda específica, se espera que el presidente electo utilice esta oportunidad para ofrecer apoyo a las comunidades afectadas y anunciar posibles medidas federales de ayuda.
Los residentes de las zonas dañadas enfrentan una recuperación complicada que dependerá del trabajo coordinado entre los gobiernos local, estatal y federal. La atención que pueda generar la visita presidencial podría traducirse en más recursos y apoyo para la región, pero la recuperación tomará tiempo y requerirá un esfuerzo sostenido.
La llegada de Trump a la Casa Blanca y su manejo de esta emergencia serán observados de cerca, marcando un inicio clave en su nuevo mandato.
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