La reciente condena del papa Francisco a un bombardeo israelí que mató a siete niños en Gaza desató una polémica diplomática. Israel acusó al pontífice de aplicar un «doble rasero», argumentando que sus declaraciones no consideran el contexto de su lucha contra el terrorismo. «Crueldad es que los terroristas se escondan detrás de niños», replicó la cancillería israelí en un comunicado.
El bombardeo, ocurrido en Jabaliya, Gaza, el viernes pasado, dejó un saldo de diez miembros de una familia fallecidos, incluidos los siete menores. Para el Papa, este hecho representa «una crueldad» que va más allá de la guerra, comentario que expresó durante una audiencia con miembros de la Curia en el Vaticano.
La respuesta israelí no se hizo esperar. Señalaron que el ataque fue una acción defensiva contra Hamás, grupo islamista que mantiene rehenes, incluidos niños, desde octubre de 2023. Israel subrayó que su objetivo es proteger a su población frente a las amenazas terroristas.
Esta disputa evidencia las tensiones recurrentes entre Israel y el Vaticano, especialmente en temas relacionados con el conflicto palestino-israelí. Mientras tanto, organismos internacionales han reiterado la necesidad de proteger a los civiles, en particular a los niños, en medio de estos enfrentamientos. El bombardeo en Gaza es otro episodio trágico de un conflicto que parece no tener fin, destacando la necesidad urgente de soluciones diplomáticas que prioricen la vida y la paz.