Ciudad de Guatemala, 10 de marzo de 2025 – La furia del Volcán de Fuego volvió a sembrar el pánico en Guatemala, obligando a la evacuación de casi mil personas en plena madrugada. El coloso, considerado el más activo de Centroamérica, entró en una nueva fase de intensa actividad eruptiva, lanzando columnas de lava, ceniza y rocas al cielo.
El vocero de la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (Conred), Juan Laureno, confirmó que la comunidad de El Porvenir, en Alotenango, fue una de las más afectadas, con al menos 900 personas obligadas a abandonar sus hogares ante la inminente amenaza. También se reportó la evacuación de habitantes de Las Lajitas, aunque no se precisó la cifra exacta.
Las escenas en la zona son de angustia y desesperación. Familias enteras fueron trasladadas al salón municipal de Alotenango, que ha sido habilitado como refugio temporal. Entre los evacuados hay ancianos, niños y personas con enfermedades, algunas de ellas recién operadas. “Hemos trasladado a personas que tienen un padecimiento médico”, señaló el bombero César Chávez.
La Conred activó la alerta naranja la noche del domingo para coordinar esfuerzos con las autoridades locales y tomar medidas preventivas. Mientras tanto, los equipos de emergencia continúan monitoreando el comportamiento del volcán, que en su última gran erupción en 2023 obligó a evacuar a más de mil 200 personas.
A medida que la lava avanza y la ceniza cubre los poblados cercanos, la incertidumbre crece entre los guatemaltecos, quienes temen que la situación empeore en las próximas horas. Las autoridades han pedido a la población estar atenta a nuevas órdenes de evacuación y evitar acercarse a la zona de peligro.
