Durante su participación en el Foro Económico Mundial, Donald Trump arremetió contra Canadá, acusándolo de aprovecharse comercialmente de Estados Unidos y sugiriendo que podría convertirse en otro estado de la Unión Americana.
Trump denunció el déficit comercial con Canadá y aseguró que EE.UU. no necesita productos canadienses como madera, petróleo o coches. En contraste, destacó la buena relación económica con México, país con el que busca acuerdos más justos.
El mandatario también reiteró su intención de bajar los impuestos corporativos para atraer inversiones a Estados Unidos, mientras sigue presionando a sus socios comerciales para equilibrar las balanzas económicas.
Esta declaración ha generado controversia, avivando tensiones en el escenario internacional y dejando claro que las estrategias económicas de Trump siguen siendo impredecibles.