Washington, EE.UU. — La NASA planea instalar un reactor de fisión nuclear en la superficie lunar antes del año 2030, como parte de su estrategia para mantener la supremacía espacial frente a China y Rusia.
Una nueva directiva interna, firmada el 31 de julio por el jefe interino de la NASA, Sean Duffy, ordena designar un líder de energía nuclear para elegir entre dos propuestas comerciales en un plazo de seis meses. El reactor deberá generar al menos 100 kilovatios, energía suficiente para alimentar 75 hogares.
China y Rusia han anunciado planes conjuntos para establecer su propio reactor lunar hacia 2035, lo que incrementa la urgencia del proyecto estadounidense. Una instalación de este tipo podría llevar a la declaración de zonas de exclusión lunar, limitando futuras misiones de otras potencias.
La NASA ya ha invertido más de 200 millones de dólares en el desarrollo de estos sistemas desde el año 2000. A diferencia de la energía solar, los reactores nucleares pueden operar las 24 horas del día, algo clave durante las largas noches lunares o tormentas de polvo en Marte.
Aunque Donald Trump ha criticado el programa lunar Artemis y ha sugerido ir directamente a Marte, la presión geopolítica y tecnológica podría reafirmar la prioridad lunar del gobierno estadounidense.
El proyecto representa una nueva era en la exploración espacial, en la que la infraestructura energética será clave para establecer colonias permanentes fuera de la Tierra.