–Cruz Pérez Cuéllar se faja ante crisis de deportaciones
–Sheinbaum destaca la cooperación de Maru
–Ahí la llevan con los campamentos para deportados
Pasan los días, las horas y el detestable Francisco Garduño Yáñez, sigue como titular del Instituto Nacional de Migración (INM), pero según comentan los enterados, se ha convertido en un cero a la izquierda, sobre todo ahora que México enfrentan el problemón de la amenaza de las deportaciones masivas. Ya no lo toman en cuenta.
No se ha informado por qué la presidenta Claudia Sheinbaum mantiene a Garduño en el cargo y no ha llamado al exgobernador de Puebla, Sergio Salomón Céspedes Peregrina, para sustituirlo, como había anunciado hace algunos meses.
Francisco Garduño ha estado bajo escrutinio desde el 27 de marzo de 2023, cuando 40 migrantes fallecieron en un centro de detención de esta ciudad fronteriza debido a un incendio iniciado por los mismos migrantes.
Después de la tragedia, el funcionario federal fue juzgado por el mortal incendio en el centro de detención de migrantes y sigue bajo proceso. A pesar de ello, continúa al frente del Instituto Nacional de Migración de México. Nadie sabe los motivos por los que no ha sido despedido.
Mientras esto ocurre, más de cien organizaciones defensoras de derechos humanos y activistas a favor de las personas migrantes solicitaron la intervención de la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo para asegurar el acceso a la justicia para las víctimas del incendio de la estancia migratoria.
Diversas organizaciones y activistas informaron que Garduño Yáñez solicitó por tercera vez “un recurso de suspensión condicional del proceso” en relación con su caso por el delito de ejercicio ilícito del servicio público.
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El presidente municipal Cruz Pérez Cuéllar ha convertido en su prioridad el tema de las deportaciones y la migración en estos tiempos de crisis.
Este miércoles, el alcalde se reunió con el Cónsul General de México en El Paso, Texas, Mauricio Ibarra Ponce de León, para tratar el tema de la repatriación de miles de inmigrantes anunciada por el presidente Donald Trump.
El reciente encuentro es un claro ejemplo de cómo la cooperación y el diálogo pueden ser herramientas fundamentales para enfrentar los retos migratorios. Este tipo de reuniones no solo demuestran un compromiso con la protección de los migrantes, sino también con la defensa de sus derechos humanos y su integridad. Pérez Cuéllar ha estado muy pendiente para resolver y enfrentar el problema de la mejor manera posible.
El presidente municipal asistió a foros, albergues y noticieros como Latinus. El periodista Carlos Loret de Mola lo entrevistó y transmitió en vivo desde la línea divisoria Juárez-El Paso el pasado martes.
El gobierno municipal bajo la dirección de Pérez Cuéllar ha demostrado su capacidad de respuesta y compromiso con la comunidad migrante, especialmente con aquellos connacionales que sean deportados por esta frontera.
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Tras las declaraciones de la gobernadora Maru Campos en el sentido de que Chihuahua no es opción para los miles de deportados, la presidenta Claudia Sheinbaum aseguró que hay una excelente relación con la mandataria estatal de Chihuahua.
La presidenta resaltó la importancia de atender digna y eficazmente las necesidades de los migrantes. Claudia Sheinbaum, en Ciudad de México, destacó su coordinación con la gobernadora de Chihuahua, María Eugenia Campos, en política migratoria. Afirmó que ha mantenido comunicación fluida y acuerdos claros con Campos y otros gobernadores, trabajando en buena coordinación hasta ahora.
Con estas declaraciones, la presidenta aclara las dudas sobre una posible confrontación entre la gobernadora y el gobierno federal.
La reciente declaración de la presidenta Claudia Sheinbaum sobre la excelente relación con la gobernadora de Chihuahua, Maru Campos, refleja un importante esfuerzo de colaboración en el manejo de la crisis migratoria. Este es un tema de gran relevancia que enfrenta el país y muestra la necesidad de una política homogénea y bien coordinada entre los diferentes niveles de gobierno.
Mientras aquí la gobernadora Campos insiste que Chihuahua no puede ser la única opción para los miles de deportados que seguramente llegaran por las fronteras de Juárez y Ojinaga.
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En las últimas horas los juarenses han sido testigos de los avances significativos en la construcción del campamento para deportados y migrantes en El Punto.
La noticia de que este centro estará listo este fin de semana y operará casi al cien por ciento el próximo lunes es, sin duda, un alivio para muchos. Sin embargo, no debemos perder de vista el trasfondo humanitario y político de esta situación.
La instalación de carpas con camas, mesas y sillas para recibir a los deportados de Estados Unidos es una medida necesaria y urgente. Este esfuerzo, gestionado en conjunto por el Gobierno Federal, el gobierno estatal y municipal, muestra una cooperación que, lamentablemente, no siempre se ve en otros ámbitos de la política. El alcalde Cruz Pérez Cuéllar ha instruido al Ayuntamiento a participar activamente en estas acciones, demostrando un compromiso que merece ser reconocido.
La instalación de estos campamentos es, en el mejor de los casos, una solución temporal. Lo que realmente necesitan los mexicanos es que el gobierno se ponga las pilas para generar una política migratoria justa y humana, y apelar a la buena voluntad de los norteamericanos.
