Un niño de 4 años de Mount Pleasant, Wisconsin, protagonizó una insólita llamada de emergencia al 911 que dejó a los agentes sorprendidos: su madre había “robado” su helado. El insólito suceso, que ocurrió el 4 de marzo, fue divulgado por el Departamento de Policía local en un post viral que rápidamente se convirtió en una de las historias más comentadas en redes sociales.
Según la grabación de la llamada, el niño, visiblemente molesto, insistió en que su madre debía ser arrestada porque se había comido su helado sin su permiso. “¡Ven a buscar a mi mamá!” gritaba el pequeño, mientras el operador trataba de entender la situación. La escena parecía sacada de una película de comedia, pero, cuando la madre intervino, explicó que el niño simplemente estaba enfadado por haberle robado su dulce.
A pesar de la naturaleza aparentemente trivial del incidente, los oficiales acudieron a la casa para asegurarse de que no existiera un problema mayor. Finalmente, el niño accedió a “no presentar cargos” contra su madre, quien explicó que el pequeño solo quería recuperar su helado, pero que no había ninguna situación peligrosa.
El caso se resolvió con una sonrisa, y dos días después, la policía volvió a la casa con una sorpresa: ¡dos bolas de helado con chispas de color azul para el niño! El gesto fue recibido con entusiasmo, y el niño, por supuesto, quedó muy feliz con su recompensa. Las imágenes de la policía con el niño, celebrando el final de este “caso de robo de helado”, rápidamente se viralizaron en redes sociales.
Usuarios en plataformas como X comentaron con humor el suceso, destacando lo “serio” que puede ser un robo de helado para los niños. Algunos bromearon con que el pequeño debería haber demandado más helado como indemnización, mientras que otros se divertían con la seriedad con la que el niño abordó el “delito”.
