Brescia, Italia. Un accidente aéreo estremeció a la provincia italiana cuando un avión ultraligero se desplomó en picada sobre una autopista este miércoles al mediodía. El impacto mató al instante a sus dos ocupantes: el abogado milanés Sergio Ravaglia, de 75 años, y su pareja, Anna Maria De Stefano, de 50.
Testigos presenciales describieron la caída como repentina y aterradora. “El avión giró y cayó de morro, verticalmente. Estalló en llamas al tocar el asfalto”, relató Enzo, quien se encontraba a unos 50 metros del sitio del accidente.
Uno de los primeros vehículos alcanzados por los restos fue un Mazda blanco. Su conductor, herido levemente, dijo: “Estoy bien”, mientras observaba los daños de su automóvil. Otro sobreviviente, Claudio Nolli, narró cómo logró cruzar entre las llamas con su Fiat Ducato antes de chocar con un camión.
El siniestro provocó un operativo de rescate coordinado entre bomberos, policías, ambulancias y un helicóptero médico. Los restos del ultraligero, fabricado con materiales de carbono, generaron humos tóxicos y complicaron la recuperación, que requirió contenedores especiales.
Las autoridades han abierto una investigación por homicidio involuntario. La aeronave no tenía plan de vuelo, algo legal bajo la actual normativa italiana. El fiscal Francesco Prete advirtió sobre la “vacuidad regulatoria” que permite operar estos aviones sin control. El mecánico y el propietario serán interrogados.
La vía hacia Milán fue cerrada por varias horas mientras los peritos intentaban reconstruir la trayectoria y determinar las causas de la tragedia.
