Por segunda vez en dos días, aviones militares venezolanos sobrevolaron al destructor estadounidense USS Jason Dunham en aguas internacionales cerca de Sudamérica, confirmaron este viernes funcionarios del Departamento de Defensa a CBS News. La maniobra fue descrita como un verdadero “juego del gallina” entre ambas fuerzas.
Según los reportes, se trató de cazas F-16 que pasaron sobre el buque durante la madrugada del jueves. No se ha confirmado si las aeronaves iban armadas. A pesar de encontrarse dentro del rango de ataque mutuo, el destructor —un Aegis equipado con misiles guiados— no respondió al acercamiento.
El incidente se suma a otro registrado apenas un día antes, cuando también dos F-16 venezolanos volaron sobre el mismo buque. El Pentágono calificó aquella primera acción como “altamente provocativa” y destinada a interferir en sus operaciones contra el narco-terrorismo.
El USS Jason Dunham forma parte de una flotilla de barcos de guerra estadounidenses desplegados recientemente en la región con el objetivo de combatir organizaciones criminales y el tráfico de drogas.
El presidente Donald Trump advirtió este viernes que Venezuela “se meterá en problemas” si continúa con este tipo de incursiones. “Si vuelan en una posición peligrosa, diría que… los capitanes pueden decidir lo que quieren hacer”, señaló dirigiéndose al secretario de Defensa Pete Hegseth y al general Dan Caine, jefe del Estado Mayor Conjunto.
El aumento de la tensión ocurre luego de que la Casa Blanca anunciara el martes un ataque contra una lancha venezolana presuntamente vinculada al narcotráfico, en el cual murieron 11 personas. Según Washington, la embarcación era operada por el Tren de Aragua, grupo designado como organización terrorista extranjera.
Además, fuentes cercanas al Pentágono confirmaron que Estados Unidos enviará 10 cazas F-35 al Caribe para reforzar las operaciones contra los carteles de la droga, en una clara señal de que la confrontación en la región podría intensificarse.