En una noche tensa cerca de la Casa Blanca, agentes del Servicio Secreto de los Estados Unidos dispararon a un hombre armado después de una confrontación cerca de la residencia presidencial. Según un portavoz oficial, el incidente ocurrió en las primeras horas del domingo, cuando la policía local alertó al Servicio Secreto sobre un hombre potencialmente suicida que viajaba desde Indiana con rumbo a Washington.
A su llegada, el hombre fue identificado cerca de la Casa Blanca y, en medio de la confrontación, los agentes decidieron disparar. La identidad del hombre y su propósito aún no se han determinado, y el portavoz evitó confirmar si el presidente Donald Trump podría haber sido uno de los posibles objetivos del sospechoso.
El hombre fue trasladado a un hospital cercano, pero su estado de salud sigue siendo incierto. Afortunadamente, ningún agente resultó herido durante el incidente. Las autoridades locales han iniciado una investigación para esclarecer los detalles de lo ocurrido. Este tiroteo pone en evidencia los riesgos que enfrentan las autoridades encargadas de la seguridad presidencial.
El Servicio Secreto no especificó si otras figuras importantes o la propia Casa Blanca estuvieron en peligro en algún momento, pero las preguntas sobre la seguridad nacional han comenzado a surgir.
