En un operativo sin precedentes, la Fuerza Interinstitucional Regional (FIR) desmanteló una armería criminal en Villa Hidalgo, Jalisco, asegurando un importante cargamento de armas y municiones.
El decomiso incluyó decenas de fusiles de asalto, cientos de cargadores y miles de cartuchos, así como dos fusiles Barrett calibre .50, capaces de perforar estructuras blindadas y derribar aeronaves.
El operativo se llevó a cabo en la colonia Mirasoles, donde elementos de la Policía Regional, en coordinación con la Guardia Nacional y el Ejército Mexicano, detectaron una finca utilizada como centro de almacenamiento de armamento.
La acción se dio cuando los uniformados observaron a un hombre armado en las inmediaciones de la propiedad; al notar la presencia de las autoridades, el sospechoso huyó, lo que llevó a la FIR a establecer vigilancia permanente en la zona hasta que la Fiscalía General de la República (FGR) obtuvo una orden de cateo.
El resultado del cateo fue el aseguramiento del siguiente armamento:
24 fusiles de asalto
2 fusiles Barrett calibre .50
543 cargadores
6 mil 451 cartuchos de diferentes calibres
1 vehículo
4 chalecos balísticos
1 fornitura
1 tirante de fornitura
Este aseguramiento representa un golpe significativo contra los grupos criminales que operan en la región, ya que el arsenal decomisado es de alto poder y suele ser utilizado en enfrentamientos contra fuerzas de seguridad y ataques dirigidos a civiles.
De acuerdo con estimaciones del mercado negro, el valor del armamento asegurado ronda los 20 millones de pesos, convirtiéndose en uno de los decomisos más importantes en México en los últimos años.
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