La caravana “Divino Niño”, que entró al territorio istmeño el pasado sábado 2 de noviembre, con unos mil 400 migrantes, finalmente se dispersó por la decisión de la mayoría de gestionar su regularización con apoyo jurídico de los sistemas DIF.
Unos 300 migrantes que caminaban ayer sobre la carretera 185 D, aceptaron ser trasladados al DIF de Michoacán y Guerrero, donde realizarán los trámites administrativos para que les otorguen una visa humanitaria por un año.
Otros 300, que permanecían en la comunidad zapoteca de La Ventosa, caminaron hoy hacia Ciudad Ixtepec, con la finalidad de refugiarse en el albergue de migrantes “Hermanos en el Camino”.
Anoche, un grupo de 200 personas pernoctó en un domo particular, a la entrada de Santo Domingo Tehuantepec, y hoy caminó sobre la panamericana 190, con la intención de llegar a la capital oaxaqueña.
Media docena de pequeños grupos de migrantes caminan dispersos sobre la carretera Costera 200 y otros sobre la Transístmica 185, hacia Matías Romero. Todos los migrantes caminan diezmados físicamente. Van agotados, pero insisten en llegar a la Ciudad de México.
De los 15 migrantes cuya desaparición fue denunciada desde anteayer, nadie supo dar informes. Los coordinadores apagaron sus teléfonos y no fue posible contactarlos. “No sabemos dónde están”, dijeron algunos migrantes a las autoridades migratorias.
Es posible que solamente hayan encaminado a la caravana de Chiapas a Oaxaca y ahora estén en espera de las dos nuevas caravanas que se reunirán en próximos días en la ciudad de Arriaga, Chiapas. En estas dos caravanas caminan unas cuatro mil personas.
Mientras tanto, las autoridades informaron que de las 71 personas rescatadas en un operativo realizado en Juchitán, 44 de ellas, mujeres y menores de edad, fueron enviadas al albergue del sistema DIF nacional de San Pedro Tapanatepec.
En ese albergue, construido por el gobierno federal e inaugurado en septiembre pasado, con capacidad para atender a 200 personas, equipado con dormitorios, cocina y comedor, las 44 personas deberán esperar que se les entregue un permiso de estancia regular por 30 días.
Dicho permiso solo les permitirá movilizarse en el territorio oaxaqueño, en lo que tramitan la visa humanitaria por un año, si abandonan la entidad, podrán ser detenidos y deportados. Esperemos que tengan paciencia y esperen los trámites, dijeron las autoridades.
ElUniversal