Lo que parecía una fiesta de cumpleaños terminó en tragedia en Boca Grande, Florida. Shawn Meuse, un pescador que celebraba con amigos, fue mordido por un tiburón limón de casi dos metros tras intentar posar para una fotografía con el animal fuera del agua.
El incidente ocurrió el sábado por la noche. El grupo había logrado quitarle el anzuelo de la boca al escualo y se preparaba para liberarlo cuando la reacción del tiburón fue fulminante: se giró bruscamente y atrapó la pierna izquierda de Meuse con sus mandíbulas.
La mordida fue tan grave que los presentes tuvieron que improvisar un torniquete mientras pedían ayuda al 911. Minutos después, servicios de emergencia trasladaron al pescador en helicóptero al Gulf Coast Medical Center, donde permanece hospitalizado a la espera de cirugía reconstructiva.
El meteorólogo Matt Devitt compartió un video del ataque en redes sociales, advirtiendo sobre lo gráfico de las imágenes. El propio Meuse, desde la cama del hospital, se mostró optimista y hasta bromeó: “Soy víctima de una mordedura de tiburón. Ahora tengo muchas buenas historias que contar”.
El caso levantó polémica ya que, según la Comisión de Conservación de Vida Silvestre y Pesca de Florida, el tiburón limón es una especie protegida. Además, el pescador no contaba con los permisos requeridos para su captura, por lo que las autoridades abrieron una investigación.
Expertos recordaron que la presencia de tiburones en la zona aumenta durante la temporada de sábalos. El jefe de bomberos de Boca Grande, C.W. Blosser, advirtió: “Hay que tener cuidado cuando se juega con la Madre Naturaleza”. Este es el tercer ataque registrado en 16 años en la región, donde la interacción entre humanos y tiburones se ha vuelto cada vez más frecuente.
