Las autoridades de Montgomery Township, en Pensilvania, implementaron una medida peculiar: un patrón de líneas onduladas en algunas calles para reducir la velocidad del tráfico, tras múltiples quejas de residentes por conductores que usaban las vías como pistas de carreras.
Los automovilistas que transitan por Gray Lane experimentan un recorrido inusual, ya que las líneas rectas fueron reemplazadas por trazos en zigzag que parecen dibujados por alguien ebrio. Según funcionarios municipales, estos patrones son la mejor forma de desalentar el exceso de velocidad en la zona.
“Nuestros ingenieros de tráfico determinaron que esta es la mejor estrategia para garantizar la seguridad de los residentes locales”, explicó la policía del municipio en una publicación de Facebook.
Annette Long, vicepresidenta de la Junta de Supervisores, comentó: “Parece que alguien que dibujaba líneas se salió del camino, pero no es lo que sucede. Hay un plan detrás de esto”.
Antes de optar por el patrón ondulado, se evaluaron reductores de velocidad, pero no eran viables por la pendiente de la calle. También se usaron radares policiales, aunque no podían mantenerse de forma permanente.
La medida generó reacciones encontradas. Un vecino comentó en redes: “Estoy honestamente en shock. Pensé que era una broma, pero parece que no”.
