Los fabricantes de helado en Estados Unidos dieron un giro inesperado: eliminarán gradualmente el uso de colorantes artificiales para 2027. La decisión, impulsada por el secretario de Salud Robert F. Kennedy Jr., marca una victoria simbólica y práctica en la lucha por una alimentación más natural en el país.
La Asociación Internacional de Alimentos Lácteos (IDFA), que agrupa a más de 40 marcas, anunció que los aditivos derivados del petróleo —asociados a riesgos como TDAH, cáncer y problemas genéticos— serán sustituidos por alternativas naturales. Kennedy, autoproclamado defensor de la comida saludable, celebró la medida con entusiasmo: “Este es un gran día para los productos lácteos y para hacer a Estados Unidos saludable de nuevo”.
Pese a las críticas por su enfoque voluntarista, Kennedy afirma que entre empresas ecológicas y tradicionales, ya cerca del 70% del sector heladero ha asumido compromisos para abandonar los colorantes sintéticos.
La FDA ha acelerado la aprobación de nuevos colorantes naturales, aunque algunas compañías como Mars se resisten al cambio, defendiendo la seguridad de sus productos actuales.
Mientras tanto, los estadounidenses consumen 8.6 kilos de helado por persona al año, lo que convierte a este producto en un vehículo clave para la transformación de hábitos alimenticios. Con esta cruzada helada, Kennedy Jr. espera comenzar un movimiento más amplio hacia una dieta libre de sustancias tóxicas.
